“Su gran saeta henchida me penetró varias veces con dulzura tan extrema que nadie hubiese podido desear que se detuviera” (Teresa de Ávila)

“La penetra con más intimidad y se goza en ella más alborozadamente que todos” (Tomás de Kempis)

Ya no basta con protagonizar un extremely-close-up de tu entrepierna spread-wide-open (versionando a Kubrick, te ufanas), mientras te penetras con 2, 3, 4 dedos hasta correrte directamente a cámara concluyendo en generosa golden shower que hace agua la boca de fetichistas varios. Ya no basta. Ya no.